¡Bienvenidos al 9° día!

Hoy vamos a meditar juntos esta frase de Carlo: “Estoy contento de morir porque he vivido mi vida sin perder el tiempo en las cosas que no le agradan a Dios”. Es una frase muy linda, es la señal de que una vida fue vivida en plenitud, en santidad! Si estás en este mundo, es porque Dios te soñó, te pensó a vos, así, como sos, con tus características y tus dones, en un tiempo y un espacio particular, y te sonó con una misión. ¡Algo que nadie más que vos, puede hacer en este mundo!

Propuesta

Hoy te invitamos a que pienses en el Plan que Dios soñó para vos, para tu vida. Ese camino único, "a medida", que te llevará a la santidad.

• Si aún no descubriste cuál es el sueño de Dios para tu vida, te invito a que le pidas a Carlo su intercesión para que el Espíritu Santo te ayude a descubrirlo. Esa misión es aquello que te va a hacer pleno y feliz (más allá de las mil dificultades que podamos tener). ¡Qué mayor felicidad puede haber que tener el alma en paz, recorriendo ese camino que nos llevará a Dios un día!

• Si ya descubriste cuál es el sueño de Dios para vos, te invito a que le pidas a Carlo su intercesión para ser fiel a esa vocación que Dios te regalo: ese caminito tuyo, particular, único, pensado a medida para vos.

• Y si en el fondo de tu corazón sabés que estás transitando un camino que no es el que Dios soñó para tu vida, te invito a que le pidas a Carlo su intercesión, para Dios te conceda la fuerza, el valor y la determinación, para poder frenar, escuchar a Dios en tu corazón y “recalcular”, como el GPS! Muchas veces a lo largo de la vida tendremos que “recalcular”: unas veces en cosas grandes, otras veces, pequeñas… Siempre cuestan esas decisiones: pero no es sólo con nuestras fuerzas, es ante todo con su Gracia!! ¡Y la paz que luego se siente en el corazón, nada ni nadie te la puede quitar!

Te invito a que pienses en ese amor incomparable que Dios tiene por vos, ese amor fuera de toda dimensión, y a que reces con esta canción tan linda:

Después de escuchar esta canción la propuesta es que pienses si hay algo puntual en lo que tenés que "recalcular" (¡generalmente todos tenemos algo para acomodar en nuestras vidas!), que lo anotes, y se lo entregues a Jesús en tu oración. Él está en la Cruz, murió con los brazos abiertos, como esperando nuestro abrazo.

Te invitamos a pensar en el Cielo, con este poema atribuido a San Agustín. (La foto de fondo es del Monte Subasio, en Asís, ¡ese lugar que tanto amaba Carlo!). Y pidámosle a Carlo, que nos ayude con su intercesión, a tener al igual que él, ¡los pies bien sobre la tierra, pero la mirada puesta en el Cielo!

Te invitamos a que reces un Rosario (esa oración que a Carlo tanto le gustaba) pidiéndole a la Virgen por el eterno descanso de todos nuestros seres queridos que han partido, por todas las almas del Purgatorio, y por aquellas personas que en el día de hoy, Dios llamará consigo.

¡Buena jornada!